No he tenido encuentros con vecinos, pero hay uo que me vuelve loco cada vez que lo veo. Les cuento que hace unos meses me mudé a un departamento. El edificio no es tan grande, tan solo hay nueve viviendas en total. Durante las primeras semanas no había visto a nadie ya que por trabajo salgo temprano y regreso tarde, entonces no me había tocado la oportunidad de conocer a los demás.
Un día entré tarde a trabajar y al bajar las escaleras encuentro que mi vecino del departamento que está exactamente debajo del mio estaba saliendo también. Al bajar la escalera, solo veo que está cerrando la puerta, por lo que quedaba de espalda y casi me le voy encima al ver que es un espécimen de hombre. Alto, fornido, calvo, como de unos 40 años y con unas piernas y unas nalgas tan deliciosas que harían que cualquier pasivo se convirtiera en activo (aunque soy pasivo, no dejo de admirar las nalgas de un hombre). Cuando estoy bajando las escaleras alento mi paso a proposito, se da la vuelta y me saluda, ahí me prendió mucho más ya que tiene una voz súper varonil.
Nos presentamos y salimos juntos del edificio. Yo nunca dejé de escanearlo y creo que se dio cuenta de ello porque a partir de ahí cuando nos vemos me habla y sonríe como de forma maliciosa (o quizá es tanta mi fantasía que creo que es así).
Nunca me he atrevido a decirle algo y nuestros encuetros, además sé que es heterosexual, ya que lo he escuchado llegar por las noches con una chica y como su cuarto está debajo del mío escucho a media noche cuando cogen pues dejan la ventana abierta. De hecho, se escucha en todo el edificio. Realmente me excita oir como hace gozar a la chica y fantaseo que estamos cogiendo los dos. Pero todo queda ahí, en fantasía.
Ojalá algún día se de la oportunidad con él, pero por mientras, cada vez que escucho que llega o sale de su departamento, me asomo a la venta de enfrente para verlo subirse o bajarse de su coche. Más de una vez se ha dado cuenta de que lo observo (Creo que es muy freaky que yo lo haga, pero me trae loco) porque se entretiene hablando por teléfono o haciendo alguna otra cosa y tarda en subirse a su automóvil o entrar al edificio. Yo hago como que subo o bajo las persianas depende de como estén en ese momento, pero me ha llegado a saludar desde abajo. Por mientras seguiré fantaseando con él y se se da algo, ya les contaré.