Estas cabinas siguen estando bien, en cuanto a limpieza y amabilidad del que atiende.
Ahora cuesta $60 la entrada, las pertenencias se siguen dejando en la entrada, pero falta que vayan más. La última vez que fui, la semana pasada, estuve desde las 12 más o menos hasta las 3 y en todo ese tiempo sólo hubo un viejito (no me son atractivos) y un señor. En otras ocasiones he salido muy satisfecho, aunque me ha tocado más suerte los viernes y sábados.
Deberían asistir más a estas cabinas